viernes, 31 de mayo de 2013

Clásicos para mi: Black Canary - Oracle: Birds of prey (1996)


Clásicos para mi es una sección que busca rescatar aquellos comics que pueden no tener el consenso universal, pero que para uno merecen ser destacados. 

Contexto:
Hoy en dia hablar de Birds of prey automáticamente significa pensar en un grupo de superheroes, mayormente integrado por mujeres,  algunas de ellas fácilmente asociables con la bati-familia de personajes. Pero en 1996 era impensable y Chuck Dixon se atrevió a uno de los tabúes de los comics de super héroes: protagonistas mujeres. Luego de ser paralizada por el Joker en The Killing Joke, Barbara Gordon fue reinventada por John Ostrander y Kim Yale como Oracle en las páginas de Suicide Squad y los títulos de Batman, haciéndola más popular de lo que nunca había sido como Batgirl. Canario Negro fue un personaje que siempre sufrió por ser un accesorio de Green Arrow, y fue este especial el que la devolvió al top 5 de los personajes femeninos de DC.

Black Canary - Oracle: Birds of prey (1996)
La popularidad del personaje de Oracle debe haber tomado a toda DC por sorpresa: un personaje femenino, no sexualizado, de imposible acción dado a su parálisis. Sin embargo, Ostrander, Yale y Dixon la hicieron irresistible y, nunca dispuestos a dejar pasar una oportunidad, los cráneos de DC querían darle un título propio. Lo natural era que liderara algún tipo de equipo, pero el Suicide Squad ya era historia y nadie iba a aceptar que mandoneara a Robin o Nightwing (para eso está Bats, después de todo). Barbara debe haber pensado lo mismo, y entonces al necesitar un "agente de campo" recurre a una colega que estaba en las malas: Black Canary. Alguna vez fundadora de la Justice League, ahora estaba en bancarrota y había cortado amarras con todos sus novios/amigos/colegas. Oracle, que todo lo sabe, le ofrece un dinero, una misión, un objetivo, y sin nada que perder, Dinah acepta.
Lo primero que hace es tirar por la borda las dos complicaciones más absurdas de su personaje: las medias de red y la peluca rubia, optando por la solución obvia de una buena tintura. Aprovechando sus más visibles características (Dinah es un minón, después de todo), Babs la manda a seducir a un dudoso inversionista/traficante de armas y el resto es una historia más de espías que de super héroes, donde las artes marciales y el trabajo de detectives son más importantes que los super poderes. Agreguemos un poco de Lady Shiva, encantador arte de Gary Frank, en su estilo dinámico de la época de Hulk, no creepy de su época de Superman, y una sólida caracterización tanto para Dinah como para Barbara (Dinah es arriesgada, lanzada hasta el punto de la imprudencia, curiosa, con mucha calle. Barbara es organizada, prudente y siente gran culpa por poner a otra gente en peligro por cosas que considera que tendría que estar haciendo ella misma), cada una de un lado de un auricular, y sin embargo, con una intimidad pocas veces vista en las historietas mainstream. La fórmula es super entretenida, y deja con ganas de más, mucho más. Ninguno de los dos personajes volvería a ser igual, y todo empieza acá.


Contexto posterior:
El especial fue seguido por otros similares y una mini serie, hasta que le dieron una serie propia que duró diez años, primero escrita por Dixon y luego hecha propia por Gail Simone. También hubo un extraño y ligeramente espantoso programa de televisión basado MUY libremente en el concepto, que lo único que aportaría sería el agregado de The Huntress al equipo de la historieta. 

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